Claves para evitar que las chinches se lleven parte del rendimiento de la soja

El complejo de chinches es un gran enemigo para el cultivo de soja, ya que le puede generar fuertes pérdidas económicas, debido al aborto de chauchas, la producción de granos pequeños y arrugados, la entrada de patógenos (como alternaria) y varios otros problemas.

Por eso, vale la pena repasar un informe elaborado por el área de Investigación y Desarrollo de Bayer, que brinda interesantes consejos para el manejo de esta plaga. Sostiene que puede generar, además, modificaciones fisiológicas en la madurez del cultivo, retención foliar (soja verde), reducción de rendimiento, pérdida de vainas y granos y, finalmente, pérdida de calidad comercial.

Las especies más comunes son la chinche verde (Nezara viridula), chinche de la alfalfa (Piezodorus guildinii), Alquiche (Edessa meditabunda) y la chinche de los cuernitos (Dichelops furcatus).

Las chinches pueden aparecer en distintos estadíos del cultivo y la colonización comienza a mediados y en el final del período vegetativo y después de la floración, infectando desde los bordes del lote.

El informe precisa que las chinches adultas afectan a la parte superior de la planta, mientras que las ninfas lo hacen en el tercio medio.

El momento principal para estar alertas comienza con la aparición de las vainas (R3), ya que allí aumenta, principalmente, la población de ninfas. Luego, debe monitorearse el resto del período crítico, que abarca el desarrollo de vainas (R4) y el inicio del llenado de granos (R5).

La severidad de los daños se va reduciendo a medida que las plantas maduran, desde el momento del florecimiento hasta el de la caída de las hojas, detallan los especialistas.

El monitoreo de los lotes es fundamental para determinar la presencia de chinches y el umbral de daño para decidir la aplicación de insecticidas. Se deben comenzar los muestreos en los bordes de los lotes, cabeceras y en las áreas lindantes a lotes de maíz o montes, que son los principales focos de infestación. Conviene hacer el monitoreo a primera hora de la mañana o por la tarde, evitando las horas de mayor temperatura, por la movilidad que tiene la plaga en ese momento.

Para el control químico de las chinches en soja, Bayer recomienda la utilización de Solomon, que cuenta con la tecnología Q-TEQ, un nuevo tipo de formulación, desarrollado y patentado por la compañía para mejorar la efectividad biológica de los ingredientes activos sistémicos. Además, esta tecnología permite una mayor flexibilidad para elegir el momento de la aplicación.

Entre sus diferenciales, Solomon ofrece un mayor poder de volteo, por su alta velocidad de penetración en el insecto y la planta. Además, cuenta con mayor persistencia, por la retención y penetración del ingrediente activo dentro de la planta.

Los técnicos detallan que la tecnología Q-TEQ facilita la llegada del producto al objetivo, porque brinda una mejor protección de la gota contra factores peligrosos del clima (como la humedad relativa) y genera una mayor protección de los órganos de la planta.

Además de usarse para combatir al complejo de chinches, Solomon también puede utilizarse para el control de lepidópteros, trips y picudos.

En este caso, los especialistas detallan que las aplicaciones se deben realizar en las primeras horas de la mañana o por la tarde, sin sobrepasar los 30 a 35 grados de temperatura, no menos de 50% de humedad relativa y con vientos que no superen los 12 km/h. En esas condiciones, el objetivo es obtener 50 gotas por centímetro cuadrado, para alcanzar el estrato medio del cultivo.

Con estos consejos, queda claro que el éxito en el control de chinches se basa en el monitoreo en tiempo y forma, pero también en el uso correcto de los mejores productos a la hora de la aplicación.

25/03/2020

Cómo cuidar a la soja de las enfermedades de fin de ciclo

Las enfermedades de fin de ciclo (EFC) son el complejo de patógenos que más daña productivamente al cultivo de soja en Argentina.  Encontramos con una mayor presencia en los lotes, a la mancha marrón (Septoria glycine) y la mancha púrpura de la semilla (Cercóspora kikuchii).

Considerando que las EFC tienen largos períodos de incubación, su diagnóstico y la decisión de control son cuestiones complejas. A esto se suma que se expresan en la ventana de tiempo en la que se define el rendimiento de cultivo (período crítico).  Ese momento, en el que las precipitaciones son clave, está ubicado entre el inicio de formación de vaina (R3) y el comienzo de formación de granos (R5).

Teniendo esto en cuenta, todas las prácticas de manejo en esta etapa deben estar orientadas a maximizar el rendimiento, facilitando la captura de recursos por parte de la planta.

En ese sentido, la aplicación de fungicidas en el período crítico es una decisión estratégica, que puede explicar hasta el 80% de la variabilidad del rinde, según las lluvias acumuladas en ese momento.  Así, el tratamiento terápico dependerá tanto del ambiente como de las lluvias que se hayan registrado.

Es muy importante el monitoreo constante a partir del inicio del período reproductivo del cultivo (R1). Pero, para definir el tratamiento químico foliar, hay dos opciones:

  • Medir la cantidad de lluvias desde el inicio de formación de vainas en adelante (R3);
  • Aplicar teniendo en cuenta los pronósticos de precipitaciones.

En ambos casos, debe considerarse que la cantidad de lluvia que determina hacer los tratamientos es de 50 a 60 milímetros.

Ante estas circunstancias y durante las últimas tres campañas, CRIPTON, fungicida foliar de acción sistémica de Bayer, ha demostrado una alta eficacia en el control de las principales EFC, alcanzando niveles mayores al 60%.

La molécula posee dos ingredientes activos (Trifloxystrobin + Prothioconazole), con diferentes modos de acción, en una relación balanceada. Esto hace que el fungicida tenga tanto efecto preventivo como curativo.

Con una buena calidad de aplicación, CRIPTON se dosifica a razón de 400 centímetros cúbicos por hectárea desde R3. Cuando se observan los principales síntomas de cada enfermedad y con condiciones ambientales predisponentes, la acción terápica del Trifloxystrobin + Prothioconazole genera una rápida penetración, mayor retención luego de las precipitaciones y óptima persistencia foliar (hasta diez días postaplicación).

Este producto permite mantener verde la superficie foliar de la soja por más tiempo, aumentando la cantidad de hojas sanas remanentes. De esa forma, tu cultivo de soja puede alcanzar su potencial de rendimiento.

Bayer siempre aconseja aplicar CRIPTON con el coadyuvante OPTIMIZER, utilizando una dosis de 300 centímetros cúbicos por hectárea para aplicaciones terrestres, con caudales de 100 a 150 litros de agua por hectárea.

Por su parte, en aeroaplicaciones, debe manejarse una dosis de OPTIMIZER de 500 centímetros cúbicos por hectárea, con caudales de caldo de 20 a 25 litros por hectárea.

Adicionalmente, vale la pena destacar que CRIPTON es un producto “banda verde”, una ventaja importante respecto al resto de los fungicidas del mercado.

Los expertos de Bayer están convencidos de que, por su consistencia y sostenibilidad de control, CRIPTON es un producto único. Si no lo usaste todavía, probalo.

14/02/2020
Fuente Bayer CropScience

Alertas por el ataque del cogollero sobre la soja

La primavera más seca de las últimas campañas, que caracterizó al inicio de este ciclo agrícola, fue el ambiente perfecto para el avance sobre soja de segunda de una plaga que es atípica en este cultivo, pero que preocupa mucho a los productores y asesores: se trata del gusano cogollero (Spodoptera frugiperda).

A pesar de que es un insecto que prefiere como alimento principal a las  gramíneas, ya sean un cultivo como el maíz o una maleza primaveral como capín, cuando no tiene esas opciones en su menú empieza a atacar a especies de hoja ancha. Y la soja es su mejor alternativa en este momento.

“La falta de humedad primaveral también limitó el desarrollo de los controladores biológicos, que son hongos entomopatógenos que regulan habitualmente el primer avance poblacional de las larvas de este insecto”, explica Pablo Carpane, líder de manejo de insectos y enfermedades en el equipo de Desarrollo de Mercado en Bayer. El especialista destaca que hay que tener en cuenta la voracidad con que se alimenta este insecto y, además, su característica de desplazarse en masa y a grandes distancias, caminando dentro del lote, mientras ingiere lo que encuentra a su paso.

“Es posible que las larvas del cogollero ataquen lotes de soja que están limpios de malezas y rodeados de áreas enmalezadas que fueron controladas por herbicidas”, subraya, haciendo foco en aquellos casos en que los tratamientos fueron eficaces. Es por esto que la primera recomendación es intensificar los monitoreos en lotes recientemente sembrados, ya que los daños de esta oruga pueden ser severos desde la emergencia de la soja, con plantas chicas y brotes tiernos, mientras el insecto aumenta su prevalencia, como está sucediendo por estos días.

Para el manejo exitoso de esta plaga es crucial tomar decisiones a tiempo. Por eso, “hasta cinco hojas expandidas del cultivo (estadío V5), el umbral de daño con el que conviene iniciar el manejo insecticida es con 1 a 3 larvas por metro lineal (0,33 a 0,6 orugas por metro cuadrado)”, dice Carpane.

Agrega que “la elección del umbral para definir la aplicación varía según las condiciones del cultivo. Por eso, si el lote está afectado por falta de agua o el ataque es severo en estado de plántula, lo conveniente es hacer el tratamiento al umbral menor”.

El experto advierte también que debe prestarse mucha atención a los lotes de maíz más tardío cuya siembra se demoró por la implantación de soja.  En esos casos, es muy importante el control de la plaga a tiempo porque la soja puede haber funcionado como un excelente puente verde alimentario para que la oruga después pueda atacar al cereal.

Para las dos situaciones, Bayer ofrece una paleta variada de insecticidas de contacto e ingestión y con gran poder de volteo para el manejo de esta plaga. «Entre nuestros productos para soja, recomendamos principalmente DECIS Forte. En cada caso respetando las diferentes dosis de marbete sugeridas”, detalla.

En referencia a la aplicación,  es muy importante respetar el horario apropiado, para evitar pérdidas por deriva de producto. Y, en los casos de un cultivo más desarrollado, “hay que considerar aplicar con una pastilla de cono hueco para que la gota asperjada llegue a los estratos más bajos del cultivo”, aconseja, considerando que ambos insecticidas pueden aplicarse con equipos aéreos o terrestres.

Las siembras tardías comenzaron su ciclo de mejor manera que los tempranos, con más humedad. Por eso, vale la pena cuidarlos a fondo. En ese sentido, advertir el ataque de una plaga tan perjudicial como el gusano cogollero es realmente fundamental.

 

5/02/2020
Fuente: Bayer Crop Science

Soluciones para que el cultivo de soja rinda en todo su potencial

En poco tiempo arranca la campaña de soja y conviene tener bien en claro la estrategia a utilizar para obtener el máximo rendimiento. Para eso, vale la pena escuchar a los expertos, que plantean recomendaciones específicas de manejo para cada momento del cultivo, con una visión integral.

Pablo Fontana, responsable de Field Marketing de Bayer para la Región Núcleo, explica en esta nota cómo hacer un control eficiente y sustentable de malezas (en el barbecho y en preemergencia), de insectos (sobre todo el de chinches, no controladas por la tecnología INTACTA) y de enfermedades, para que las variedades expresen todo su potencial.

«En lo que a manejo de malezas respecta, recomendamos la utilización de estrategias de overlapping, solapando durante todo el barbecho y preemergencia, distintos productos residuales, ubicados cada uno según la eficacia que tengan sobre cada maleza target. Para lo cual podremos planificar una aplicación de Barbecho Largo, Barbecho Corto y Presiembra o Preemergente», comenta Fontana. 

En el período de barbecho largo la principal maleza a tener en cuenta es la rama negra y, en algunas zonas, toma cada vez más relevancia el raigrás. “Para el control de esas malezas en preemergencia recomendamos la aplicación de Percutor, un herbicida residual. En todos los casos, debe ser acompañado por Roundup para lograr la máxima eficacia”, agrega.

Durante la primavera y con el aumento de las temperaturas, comienzan a aparecer las malezas específicas de este período y las de verano, entre las que toman relevancia, en gran parte del país, yuyo colorado y gramíneas anuales como digitaria, echinochloa y eleusine. «Para eso, en el momento de un barbecho corto y pensando en las primeras emergencias de yuyo colorado, recomendamos la aplicación de Brodal. Este producto aporta un control inicial de la maleza y nos permitirá llegar libre de Amaranthus hasta la siembra del cultivo”, describe el experto. Pero agrega que en el caso de no haber hecho un control oportuno de rama negra, está la opción de Sencorex, que además aporta residualidad para yuyo colorado.

En el período de presiembra o preemergencia, con el objetivo de hacer overlapping o solapamiento de residualidades con los otros herbicidas aplicados, Fontana recomienda aplicar una mezcla de Flumyzin y Harness siete días antes de la siembra.

Otra alternativa que propone es la mezcla de Sencorex con Harness. “Estos dos productos nos aportan control de las principales problemáticas de yuyo colorado y gramíneas anuales y no deberíamos tener ningún problema de escapes que necesiten control postemergentes”, dice.

Para el control de malezas, Fontana hace hincapié en la importancia de tener una estrategia de control integral. “El uso de nuestros herbicidas no es la única herramienta. Impulsamos con mucha fuerza la utilización de cultivos de servicios y solo recurrir a productos que tengan registro para las distintas problemáticas; además, aplicar las dosis adecuadas y hacer un tratamiento profesional de semillas”, detalla.

En este punto, el especialista remarca que todas las variedades de soja Asgrow cuentan con tecnología INTACTA, que protege al cultivo contra los principales lepidópteros que pueden atacarlo.

“Pensando en chinches y picudo de la soja (este último en el norte), una excelente solución es Solomon, cuyo diferencial, más allá de su eficacia como insecticida, es que sus principios activos están dispersos en aceite. Esto hace que, al mezclarlos con el agua, se genera mayor penetración y llegada del producto en la hoja”, explica. 

Un aspecto a tener en cuenta es que la siembra de sojas INTACTA requiere también de la implantación de refugios con variedades que no tengan esa tecnología. En ellos habrá que hacer un manejo tradicional de lepidópteros, para lo cual resultará muy útil un producto como Belt. “Es un producto que no afecta a la fauna benéfica y trabaja sobre cualquier tamaño de oruga, generando una rápida detención del daño. La oruga muere por una parálisis de sus nervios, con lo cual deja de alimentarse a las tres horas de haber tomado contacto con el producto y, así, se frena rápidamente la desfoliación”, describe Fontana.

Finalmente, Bayer también tiene soluciones muy eficientes para el control de las principales enfermedades fúngicas que afectan al cultivo de soja, entre las cuales se encuentran Sphere, Cripton y su último lanzamiento: Cripton Xpro. 

“Cripton es el único producto fungicida del mercado que tiene Prothioconazole, acompañado de la estrobilurina Trifloxistrobin. En nuestros ensayos queda claro que logra un mayor control que los productos de la competencia y tiene un plus de rendimiento promedio de 125 kilos versus el principal competidor del mercado”, cuenta Fontana. Con respecto a Cripton Xpro, explica que se trata de una triple mezcla con la última tecnología en fungicidas: combina la acción curativa de Prothioconazole con la preventiva de Trifloxistrobin y Bixafen para que nada quede librado al azar.

Con esta paleta de soluciones y estrategias, el técnico está convencido que desde Bayer aportan una solución integral al cliente, para darle la mejor genética y también las herramientas para resolver las problemáticas de sus cultivos de manera eficiente y sustentable.

 

Fuente Bayer